Uno de los días más tristes de mi vida en la política universitaria fue sin duda aquel en que una “supuesta” mayoría estudiantil, impulsada por intereses mezquinos, privo de la oportunidad de elegir sus representantes gremiales a los estudiantes de las extensiones áulicas, los que no tuvieron la posibilidad de votar en esa oportunidad y elegir por si mismos que representación debían tener.
Fue mucho lo que se trabajo por instalar la educación superior en todo el país y llegar con cursos universitarios a aquellos para los cuales cursar en una universidad libre, pública y gratuita parecía una utopía.
Las extensiones áulicas nacen en los noventas cuando el gobierno neoliberal que conducía los destinos de la nación mandaba a lavar los platos a una investigadora que alertaba de las consecuencias nefastas que tendría para los países del tercer mundo, la aplicación del consenso de Washington y en respuesta al intento de declarar a la educación superior como un servicio más y no como un derecho.
En respuesta a estas políticas del estado nacional un grupo de intendentes radicales, peronistas, vecinalitas e independientes, salieron a firmar convenios con universidades nacionales con el fin de garantizar el derecho a la educación superior en sus ciudades. Con este tipo de actitudes se buscaba reducir la brecha educativa, aquella que es la más difícil de acortar en el tiempo y que más esclaviza a los pueblos.
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Extensión Aúlica de Monte Caseros, verdadero ejemplo de integración regional |
l Fue así que en 1995 se firma por parte de la facultad el primer acuerdo con el municipio de Las Flores para el dictado de cursos de Periodismo y Comunicación Social que equivalían al cursado de la carrera; a partir de ese primer acuerdo llegarían las firmas con los municipios de Punta Alta, De esta manera se federalizaba la educación y la facultad se comprometía con la educación libre, pública y gratuita. Compromiso que se pudo llevar adelante con el aporte fundamental de los docentes que se comprometieron desde el comienzo con el proyecto; sobrellevando la crisis política-económica más grande que atravesó nuestro país, en donde esperaron en algunos casos, hasta ocho meses para cobrar sus sueldos los que algunas veces fueron pagados con bonos por parte de los municipios, otras pagándose de su bolsillo los pasajes para llegar a tiempo a dictar clases por que en las "extensiones" los alumnos están siempre esperando. Como olvidar las cuatro jornadas de Más de 2000 alumnos pudieron iniciar una carrera universitaria gracias a esta modalidad, en 15 municipios de diferentes puntos de país se desarrollaron actividades académicas como jornadas, talleres, seminarios y charlas abiertas a la comunidad. Todas las cátedras que componen los diferentes planes de estudios pudieron realizar la experiencia de dictar clases en contextos diferentes a los habituales. Es fundamental el material intelectual que se produjo/produce en las extensiones áulicas para el desarrollo local por medio de los trabajos prácticos, finales y tesis de grado. Pero todo lo que se pueda argumentar a favor de lo importante de federalizar la educación no alcanza si los que cursan en ella no se sienten parte integral del sistema y sentirse completamente parte del mismo significa poder elegir quien los representen gremialmente en un centro de estudiantes único que entienda la problemática de los estudiantes como un desafió regional y que cada sede es parte de |
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